A mal tiempo buena cara..

El dia habia sido demasiado asqueroso, no tenia muchas ganas de andar caminando a decir verdad tenia mas ganas de navegar con aquellas fuertes corrientes justo como los piratas de antaño lo hacian, sin miedo al mar y con una sonrisa al destino que podria ser una muerte rapido o lenta, o quiza si se tenia mucha suerte salir con vida de una gran tormenta y contarla a todos los que se cruzaran en el camino, mi sonrisa habia vuelto por unos pocos segundos cuando me encontre a unos marines la verdad no tenia intenciones de pelear pero al parecer ellos notaron algo en mi que les llamo al atencion o mejor dicho le llamo la atencion a uno, el otro al parecer siguio su camino quiza por que no fui de su interes o me vieron cara de novato

Aquel marine se acerco y con aquella cara de intento de malo fijo su rostro en el mio, cosa que me desagradaba por completo - que tenemos aqui? un pirata novato.. seras facil de llevar a Impel Down - dijo con una risa cosa que me causo gracia a mi pues desde niño nunca me habia dejado de ninguna otra persona, solo lo mire a los ojos - quiza sea novato pero soy muy capaz de acabar contigo - respondi con gracia y dando un golpe con fuerza a su rostro, al parecer con ese golpe me di cuenta de quien era el novato pues al caer al piso aquel marine no se levanto, solo intente evitar una carcajada por la debilidad de aquel asqueroso tipo y continue mi camino auqnue claro estaba que la marina encontraria a su hombre y buscaria por todos lados al responsable

Entre en la primer taberna o cantina que encontre y fue muy grata mi bienvenida pues lo primero que escuche fueron las palabras de una joven la cual habia actuado de forma grandiosa contra unos borrachos, una gran sonrisa se dibujo y desde la puerta la mire fijamente - asi que deseas salir de este lugar.. que agradable - dije contento aunque no tenia barco par anavegar si un pequeño bote el cual me ayudaba a cruzar las aguas en lo que conseguia un buen carpintero que fabricara el gran navio que me llevaria a todos los mares conocidos, pues mi sueño era ser el mas grande Yonko y lo lograria algun dia - si gustas podria llevarte en mi bote no es la gran cosa pero sirve de transporte, tan siquiera podria llevarme a donde existiera un gran carpintero que construya mi barco - dije con felicidad y decision, y claro con la mirada de aquellos borrachos y algunos mas en la cantina

Solte una carcajada con las cosas que habia dicho y las cuales eran completamente reales, despues de todo siempr ehabia un maldito farsante que producia sueños muy malos a la demas gente, incluso a aquellos que en verdad tenian grandes sueños como el mio o incluso mas altos como ser rey d elos piratas, yo no iba tan alfo simplemente me importaba ser reconocido y tener a mi gran familia y claro ser un yonko muy poderoso y el señor de las aguas en una parte del gran mundo, mis ideas solo llegaban a eso pues para ser un yonko se debia ser muy poderoso en cambio para ser rey solo encontrar un tesoro, mi cara tenia una sonrisa grande y mis ojos estaban fijado en los de ella como si no hubiese nadie mas y para mi solo estabamos ella y yo en ese lugar mirandonos y cuestinandonos o mejor dicho ella me cuestionaba

Como podria demostrar algo asi? la verdad no sabia pero simplemente hable - soy un maldito pirata... busco tener fama, riqueza y poder... mi unico sueño es llegar a ser el mas grande yonko y tener a una gran familia... e incluso peñeare por ella sin importar que la marina entera se interponga, si no puedo convencerte entonces puedes quedarte aqui y seguir esperando a que alguien mas llegue y te diga cosas como las que otros han dicho y seguir en una larga espera - dije con aquella gran sonrisa en mi cara y tomando una botella de ron que habia traido un mesero unos minutos antes de que comenzara a hablar, la verdad no buscaba qu ecreyera en mi ni convenserla, solo queria que ella tomara la decision de confiar o no en mi para juntos salir de aquel lugar tan odioso y alejarme de la marina que quiza con gran probabilidad me estaria siguiendo

Tome de la botella de ron una gran cantidad de licor y rei mirando a los tipos qu em eveian raro por haber dicho aquello de ser un yonko, quiza me tomaban como loco por haber dicho aquellas cosas pero me importaban un comino - que ven!! se les perdio algo!!?? - dije con un tono serio y molesto pues el que la gente me viera me molestaba, aquella fuerte voz que salio d emi hizo que los demas volvieran a lo suyo y que no me tomaran atencion, me gustaba tener la atencion pero nunca de personas que estuvieran viendome como si fuese alguien raro o estupido y quiza lo era pero nadie tenia el derecho de hacermelo notar

A Gira no le sorprendió que ese hombre se riera, después de todo no esperaba otra reacción ante su prudencia. Sus palabras eran cada vez más interesantes y escucharlas no era nada cansado. Tal vez haya llegado el momento de encontrar a un verdadero pirata. La joven esperó con paciencia a que terminara de actuar y desarrollar sus acciones. ¿Un Yonko? Sin duda alguna aspiraba a ser algo muy grande. ¿Y ella qué? ¿Sólo aspiraba a vengarse de su padre? ¿O había algo más? Tal vez desde el principio su idea era cruzar todos los mares conocidos y encontrar los tesoros que nadie jamás habría tocado. Tal vez esa era su gran idea. Tal vez si viajaba con ese sujeto podría encontrar su verdadero propósito.
Gira notó las miradas que los borrachos le echaban al sujeto, eran las mismas que siempre recibía por parte de ellos cuando estaba en ese sitio y hablaba de salir por el mundo. Una pequeña sonrisa escapó de sus labios cuando el hombre con suma seriedad les preguntó si se les había perdido algo. Bien, comenzaba a agradarle ese tipo y no podía negarlo.
Miré a Bob quien tan sólo suspiró abatido, ya acostumbrado a ese tipo de ambiente era común que no se molestara por todo eso.
- Bien, parece que tenemos a un invitado especial- comentó el tabernero sirviendo varios tarros de ron- Hoy el ron corre por la casa, me has caído bien muchacho.
- Vaya, has tenido suerte- comentó entonces Gira riendo y poniéndose de muy buen humor a comparación hace unas cuantas horas- Muy pocos logran cautivar el frío corazón de este tabernero.
- Sigue hablando y dejo que tú pagues todo- rió Bob y Gira empezó a quejarse mientras el resto de la taberna soltaba una carcajada. El ambiente hostil que había dentro de ese sitio había empezado a desaparecer.
Todos empezaron a meterse en sus propios asuntos, felices en aquella fiesta que parecía haber empezado. Gira se acercó al joven y lo miró con atención para decirle:
- Lamento mi descortesía de antes, pero no me gane el 10 en relaciones sociales- suspiró ella bebiendo un poco de su ron- Sin embargo comprenderás que no eres el único que llega con esas palabras y después resulta ser un estafador- lo miró con frialdad entonces- Por ahora pareces no serlo sin embargo no te voy a quitar el ojo- regresó a su expresión tranquila- Si hablas de partir al mar supongo que a estas alturas no serás un inexperto ¿verdad? ¿Eres consciente de todos los peligros que alberga el mar? Los reyes marinos, las tormentas y los marines. Además si quieres aspirar a ser un yonko tendrás que entrenar muy duro y lograr una muy buena reputación que no creo que logres completamente solo. Necesitarás ayuda de una tripulación ¿Estás pensando en reclutar una? Además está el problema del barco, sin un buen barco no llegaremos a la siguiente isla a salvo y mucho menos si no conseguimos un médico, un cocinero y un excelente navegante, además de otros tripulantes esenciales..
Calló unos segundos para dar una calada a su cigarrillo.
- Mi especialidad son las armas de largo alcance y el uso de ellas. Mi viejo – refiriéndose a su padre adoptivo- Me enseño lo básico para sobrevivir con ellas y producirlas. Por estos barrios me conocen como “Two Hands” si tenemos la ocasión ya verás por qué. – Rió levemente dando una calada de su cigarrillo- A estas alturas supondrás que si te estoy dando mi currículo completo es que he aceptado tu propuesta. No me vayas a decepcionar.[/color]
Y fue entonces cuando Gira recordó algo importante y se levantó de golpe.
- Demonios, ya decía yo que se me olvidaba algo.
De repente un aleteo de alas se escuchó en la habitación pero nadie pareció percibirlo por que estaban acostumbrados a él, sólo los sujetos que andaban por primera vez por ahí les sorprendió ver una mancha verde y deslumbrante entrar a la habitación y posarse en el hombro de Gira.
Una hermosa ave color verde observó al joven con quien su dueña había estado hablando. Gira suspiró.
- Espero que no te moleste si Ikal nos acompaña- refiriéndose al quetzal – Es un compañero de la vida y casi nunca me separo de él. Si no fuera por esta ave ya me hubiera ido al otro mundo desde hace años.
Gira miró a Ikal de reojo, el ave parecía no decir nada y sólo se limitaba a observar quieta como una estatua al desconocido. Sólo un aleteo rápido le dio la señal a Gira quien entendió la situación enseguida.
- Marines- fue suficiente que comentara eso para que toda la felicidad de la taberna se rompiera en un instante. Los piratas se levantaron, los borrachos se ocultaron bajo las mesas y el tabernero suspiró mientras limpiaba una copa como si nada pasara.
- Buen momento para ver tus habilidades – comentó Gira al desconocido- Aún no se tu nombre pero si logramos salir de esta nos diremos los nombres ¿Te parece? – rió desenfundando su dos pistolas con una sonrisa majestuosa en su cara, preparada para cualquier cosa.
En cuestión de segundos varios marines entraron a la taberna. Uno de ellos que parecía ser el líder desplegó un aviso.
- Esta taberna será clausurada por recibir a piratas y otra clase de criminales todo el tiempo. No opongan resistencia si no quieren salir heridos.
Y comenzó el show, nadie supo quien empezó si los piratas o los marines, sólo comenzó una batalla campal en aquella taberna, tan campal que los piratas que estaban fuera o pasaban por ahí se unieron a la fiesta.
Gira danzaba con sus dos pistolas derribando a varios marines con facilidad y miraba de reojo cualquier acción del sujeto que había captado su atención.

Escuche atento y mirando cada accion de la chica recordando todos aquellos tiempos en los cuales estaba apunto d emorir en mandibulas de un rey marino, en las filosas armas de un cazarrecompenzas, en los pies de un marine con esposas en mis manos o pies, recordando todas esas veces que fui salvado por mi mascota Atashi quien me habia ayudado en la pelea de forma sensilla como golpear a mis enemigos, aunque no era fuerte mi pequeño Atashi sus golpes eran lo suficiente poderosos para hacer que un marine se doblara con el golpe, de alguna manera el recuerdo de Gol D. Roger llego a mi en la forma en como navegaba entre todos los mares evadiendo reyes marinos, tormentas, al poderoso Barbablanca, al pirata Shiki e incluso a la poderosa armada d ela marina de ese tiempo, las veces que habia logrado escapar de trajicos finales pero no era suerte solo se llamaba destino y voluntad, pues el era el mas grande hombre con una voluntad inquebrantable.

seguia mirando a la chica sin mirar a otro lado que mas podia hacer ella hablaba y decia que yo habia captado su atencion, cuando el tabernero invito las bebidas yo tome un tarro de ron bebiendolo sin miedo alguno y como si se tratara de una bebida habitual como el agua o algun otro tipo de bebida no alcoholica, hablo demasiado y la verdad responder hubiese sido algo desgastante pero respondi con una sonrisa - claro que conosco todos los peligros del mar pero que seria un pirata si no existieran esos peligros? no acaso fue asi como El rey d elos piratas navegaba en las aguas del Grand Line? ademas por ahora tengo un bote con el cual podremos seguir mientras conseguimos un barco, se poco de navegacion pero lo suficiente para ir a otro mar como North Blue. Y no, yo no pienso hacer una tripulacion mas bien pienso hacer una familia en la cual todos nos ayudemos para cumplir nuestras metas - de pronto se levanto de golpe y entro un hermoso ave, me saco una sonrisa por la belleza de esta pues era grandioso el ver un ave asi, muy poco conseguian una de aquel hermoso color, su ave me miraba bastante y sentia algo raro en ella como si estuviese analizandome aquella ave - no hay problema que nos acompañe siempre y cuando no le haga nada a Atashi mi mascota - dije sonriendo con alegria pues eso para mi era un 75% de aceptacion al unirse a mi cosa qu eme gustaba y agradaba demasiado

Enseguida entraron varios marines muchos se quedaron por lo visto varios piratas y aquellos borrachos parecian desaparecer como los insectos, debajo de las mesas y entre los rincones, mire a la chica y sonrei pues antes ya habia peleado con un marine o mejor dicho habia golpeado a un debilucho que se habia atrevido a intentar detenerme como si fuese un vil y asqueroso delincuente en vez de clasificarme como un pirata. Empezo la pelea entre todos muchos caian tanto piratas como marines mire a la chica que comenzaba a disparas, una gran artillera y por lo visto perfecta con las armas, mire el piso sin hacer nada solo esperando como si estuviese entregandome a la muerte mientras sonreia ligeramente, un marine se lanzo contra mi con su espada de frente, lo mire directamente a los ojos y gracias al arduo entrenamiento que habia tenido dias antes me movi hacia un lado esquivando la punta de esa espada, movi mi brazo derecho desde mi cintura hasta su menton golpeando con fuerza hacia arriba sintiendo como su mandibula se rompia, mientras en mi cabeza se comenzaban a cruzar todas las ideas de grandes aventuras que podia hacer como Yonko, viendo grandes encuentros contra la marina con ayuda d emi familia de piratas.

Mire como seguian entrando marines como si se tratara de un hormiguero lleno de llamas del cual escapaban las hormigas con el afan de sobrevivir, mire a un marine lanzarse con su espada hacia la chica y me movi rapidamente interponiendome recibiendo el filo de la espada en mi hombro, el filo era bueno pues habia atravezado con facilidad mi hombro, no me inmute pues la adrenalina en mi cuerpo era grande, con mi puño rompi la espada y seguido golpee el abdomen del marine haciendolo arrodillarse frente a mi, mire sus ojos y di un fuerte rodillazo en su rostro dejandolo casi muerto, ya que no quise terminar con su sufrimiento asesinandolo era mejor dejarlos vivis y dejarles ver como sus compañeros sufrian de la misma forma que nosotros debiamos verlo cuando ellos ejecutaban a nuestros compañeros piratas - sabandijas han dicho que nos vienen a capturar pero solo parece que vinieron a morir como sucios insectos - dije riendo consumido por un odio por cada uno d elos marines al ver como ellos mataban a los piratas jovenes que estaban ahi

El hormiguero de marines parecía no cesar y Gira empezaba a impacientarse. Varios de ellos ya habían caído por medio de sus pistolas, no es que los hubiese matado pero si les dejaba bastantes heridas graves y el chico de antes no parecía alardear para nada. Un solo vistazo le dejó claro a la joven pirata que aquel hombre era muy fuerte. Le llamaba la atención sus palabras anteriores “familia”, él no deseaba formar una tripulación si no una familia que se protegiera todo el tiempo, sin duda sonaba maravillosa e interesante esa idea. Era diferente a todas las propuestas que le habían planteado antes.
— ¡Retirada!—Gritaban algunos de los marines que aún se mantenían en pie comprendiendo por fin que era momento de retirarse para volver después con una comitiva mucho más grande.
Como si el diablo les persiguiera los marines salieron corriendo llevándose a los heridos cargando. Los borrachos celebraron su falsa victoria y los piratas empezaron a cantar contentos de haber salido victoriosos.
Gira guardó sus pistolas en un solo movimiento y se acercó de nuevo al hombre con el que charlaba antes.
- Buena pelea, sin duda eres muy bueno en esto—sonrió mientras encendía su cigarrillo—Me llamo Gira, perdona no haberme presentado antes—le extendió su mano esperando recibir respuesta de esta.
— ¿Qué te parece si vamos a un sitio más tranquilo para hablar de los detalles? Te invitó a comer a mi casa, es pequeña pero suficientemente oculta de los molestos marines.
Al momento en que pronunciaba esas palabras, el ave de color verde regresaba a su hombro pues durante la batalla había permanecido observando desde un sitio seguro por ordenes de la misma joven ya que no deseaba que saliese lastimado.
—Esa es buena idea—comentó el tabernero que estaba ahí cerca—Los marines no tardarán en recuperarse y mandar otra comitiva, es mejor para mi negocio que vayan a charlar a otro sitio.
Era una linda forma de correrlos de manera agradable y decirles que era momento de que se fueran de ese lugar antes de que hubiese más problemas. Gira suspiró divertida y esperó la respuesta de aquel hombre cuyo nombre también deseaba saber.

A uno mas de los marines antes de que escapara alcanze a lanzarle un golpe en la columna, seguido escuche aquel sonido de retirada de los marines, el demonio que llevaba dentro de mi que pedia eliminar a todos comenzaba a ser domado por mi, no por nada me llamaba en demonio negro, muchos marines me habian atacado por verme "sospechoso" y lo unico que podia hacer era defenderme y darles muerte a todos los que se atrevian a desenfundar una espada o pistola ante mi, quiza no era mucho pero para ser un yonko mi fuerza debia ser mayor y mi voluntad inalcanzable, mire a los marines correr y llevandose a todos los heridos parecia que muchos de ellos habian sufrido grandes daños por varios, me acerque a un pirata en el piso y lo ayude a levantarse pues por lo visto tenia una gran herida en la pierna, escuche las palabras de la chica y sonrei de forma ligera - gracias lo mismo digo, eres muy buena tiradora - dije mirandola a los ojos y caminando hacia ella para estrechar su mano

Sonrei con alegria pues quiza eso era un union a mi familia - es todo un placer conocer a una gran artillera como tu Gira todo un placer, mi nombre es Gouki D. Akuma a tu servicio - dije soltando su mano de forma suave, los marines no eran fuertes pero si percistentes con tal d ecumplir su asqueroso trabajo, mencionaron ir a otro sitio por ejemplo la casa d ela chica aunque no era algo bien visto por muchos asenti con la cabeza pues hablariamos de un futuro sin ningun tipo de relacion en especial, tome un poco de ron de una botella rota - me parece bien me gustaria poder convencerte de formar parte d emi familia y navegar por los mares - dije sonriente y mirandola a los ojos escuchando como aun habia pasos de marines alejandose de la taberna a paso rapido como si desearan llegar pronto con sus refuerzos

Aquel hombre aceptó sin chistar la propuesta de Gira, ella sonrió y miró de reojo a los piratas y borrachos que murmuraban cosas entre ellos.
- ¿Tengo algo en la cara?—les preguntó fríamente y todos se pusieron a platicar de otras cosas. Ella suspiró molesta, realmente no le gustaban los mal pensados y borrachos de ese lugar, deseaba salir de aquel agujero de ratas lo más pronto posible.
--En fin, acompáñame—le indicó a Gouki y comenzó a caminar hacia la parte trasera del bar en donde había una puerta. Abrió la puerta y fueron conducidos a un túnel oscuro.
--¿No le temerás a la oscuridad, verdad?—preguntó divertida mientras entraban al túnel cerrando la puerta tras de ellos. Instantes después Gira encendió una antorcha que estaba en el suelo permitiendo que el lugar se iluminara con más claridad. Era tan sólo un viejo túnel que daba algunas vueltas.
--Fue construido por viejos piratas que se ocultaban de la marina hace muchos años pero muchos de los túneles fueron descubiertos y permanecen cerrados. Este es uno de los pocos que se mantiene en pie.
La pirata continuó con su camino sin vacilar ni un solo instante. Algunas ratas pasaban cerca de ellos de vez en cuanto pero escapaban atemorizadas por la antorcha. Después de unos largos minutos de camino por fin llegaron a un callejón sin salida. La pirata presionó un interruptor dentro de la pared y esta se abrió.
--Bienvenido al viejo taller de mi padre—comentó la pirata cuando entraron al lugar y la pared se hubo cerrado tras ellos. Instantes después la habitación se ilumino automáticamente con otras antorchas.
--Era un gran inventor, no se le escapaba ningún detalle—comentó señalando el taller lleno de varios tipos de prototipos de pistolas viejas o dibujos de modelos—Estás—señalo las dos pistolas que traía en el cinturón—Fueron sus últimos inventos antes de que la marina se lo llevara.
Cerró el puño un poco molesta.
- En fin, este no es un sitio cómodo para charlar, vamos a la parte de arriba.
Le indicó a Gouki que la siguiera y ambos salieron de aquel sótano oculto para salir a un lugar más alumbrado por los rayos del sol. Una aparente casa común y corriente. Gira lo guió hacia la cocina donde había una pequeña mesa.
--Bienvenido a mi pequeño hogar, no es muy grande pero es cómodo—Se sentó en una de las sillas y esperó a que el chico se sentara— ¿Entonces, cuáles son tus próximos planes?